Distribuyen agua insalubre en Michoacán

13 marzo 2008

106 GOBIERNOS OMISOS E IRRESPONSABLES NO CLORAN ÓPTIMAMENTE EL LÍQUIDO; ARRIESGAN LA SALUD DE POBLADORES; PESEA A QUE HAY ANUNCIOS DE ‘MANO DURA’, NADIE SANCIONA

Yuri Galván / La Voz de Michoacán

13 de marzo de 2008

En Michoacán, los habitantes de 13 municipios viven en riesgo latente de contraer una infección gastrointestinal, dermatitis o conjuntivitis, pues tienen que emplear y consumir agua que no está debidamente clorada bajo los estándares de calidad que exige la Secretaría de Salud por irresponsabilidad todavía (pese al avance de la tecnología) de algunos ayuntamientos.

Actualmente, en la entidad 13 municipios no cloran adecuadamente el vital líquido que abastecen a la sociedad, a pesar de la vigilancia y recomendaciones constantes de la Secretaría de Salud en Michoacán (SSM) y la Comisión Nacional y Estatal del Agua. Por tanto, distribuyen agua que no es tan potable, sin embargo, sí la cobran puntualmente como si lo fuera.

Ante tal situación, es urgente que se ponga mano dura a los presidentes municipales que omiten clorar el agua como es debido, pues cuando deberían estar entre el 95 y el 100 por ciento en los límites de calidad, se ubican por debajo del 75 por ciento del nivel de eficiencia.

Es decir, en vez de que cada litro de agua cuente con entre 0.2 y 1.5 miligramos de cloro, tienen menos cantidad de lo establecido, explicó Gerardo Mendoza Ramírez, jefe del Departamento de Evidencia y Manejo de Riesgos de la Dirección de Regulación Sanitaria de la Secretaría de Salud.

El no aplicar la cantidad mínima de cloro establecida por las leyes de salud y las normas mexicanas puede poner en peligro la salud de la población entera, al grado de que puede resurgir el cólera, situación que no se ha presenciado desde los años noventa.

La negligencia y omisión de los presidentes municipales de Álvaro Obregón, Santa Ana Maya, Tzitzio, Villamar, Tangancícuaro, Tocumbo, Benito Juárez, Ocampo, Nuevo Urecho, Yurécuaro, Churumuco y Aquila, provoca en cierto grado que todavía en Michoacán cada año 169 mil personas padezcan de enfermedades gastrointestinales y que 40 niños pequeños mueran de forma anual a causa de las diarreas.

Según la Dirección de Regulación Sanitaria, son 13 municipios los que de forma constante son detectados sin clorar el agua en su totalidad (con 0.2 y 1.5 miligramos de cloro por litro de líquido).

Es decir, de 52 semanas que tiene el año, en menos del 75 por ciento de ellas se sanea el líquido, el resto de las semanas no, o bien de manera permanente aplican el cloro, pero no en las cantidades establecidas por las normas.

El colocar menor cantidad de cloro en el agua de consumo humano, es decir, menos de 0.2 miligramos de este producto en cada litro del vital líquido, es riesgoso, abundó Mendoza Ramírez, pues a menor cantidad de cloro no se da certeza a la población de que el agua esté libre de coliformes, bacterias causantes de enfermedades gastrointestinales.

Ello debido a que todavía existen semanas en las que son detectados sin la cloración respectiva del vital líquido que abastecen en sus ciudades, al grado que anualmente sólo cloran el 75 por ciento del recurso natural, lo cual significa que hay semanas en las que la población sólo recibe agua insalubre o no tan limpia.

Otros municipios, en cambio, que constantemente se negaban a clorar el agua, bajo el argumento de que “sabía mal”, como el caso de Tingambato y Pichátaro, ya optaron por desinfectar el recurso, pero con yodo, para no dotar a la población de líquido insalubre con bacterias que bien pudieran encubar la bacteria del cólera.

El riesgo a la salud
Para el Departamento de Epidemiología y Medicina Preventiva de la SSM, el agua sin su respectiva cloración sí es de riesgo para la salud, ya que es fuente generadora de infecciones gastrointestinales, respiratorias, de la piel y ojos.

La población que utiliza y consume agua sin clorarla es más susceptible a contraer salmonelosis, resultado del cepillado de dientes con agua directa del lavamanos y no de garrafón, o bien hasta por consumir en platos y otros recipientes que fueron previamente lavados con este líquido insalubre.

Los problemas de la piel y ojos también están a la orden del día, pues durante el aseo diario de las personas, con agua sin desinfectar, se exponen a contraer dermatitis y conjuntivitis, entre los más comunes los hongos y alergias.

El riesgo de que pueda surgir una epidemia o un brote de cólera también está latente, por ello la SSM monitorea y, en caso de que detecte más de dos mil 900 diarreas en el lapso de una semana, significa que algo anda mal, ya que el promedio actual es de mil 600.

Pese a que las normas, comentó Juan Rangel Camarena, responsable del programa de Agua Limpia de la Comisión Nacional del Agua (CNA), establecen que es el presidente municipal el responsable de dotar de agua libre de bacterias a los habitantes, es necesario también que la población al interior del hogar se encargue de sanear constantemente sus tinacos y aljibes, lo cual debe hacerse mínimo cada seis meses, depositando luego del lavado una gota de cloro por cada litro de líquido.

El proceso es sencillo y barato, ya que el cloro se obtiene en cualquier tienda de abarrotes, mercado o supermercado.

Por ello es recomendable no consumir alimentos en utensilios recién lavados sin secar.

Adeudos, causa de que varios municipios no compran cloro
Pese a que el Gobierno del Estado, con el apoyo de la Comisión Estatal de Agua y Cuencas (CEAC), subsidiaba el cloro a los 113 municipios para que el costo les resultara más barato y pudieran proteger a la población de diarreas, los retrasos en los pagos y los adeudos constantes de algunos ayuntamientos hacia el Gobierno del Estado provocó que el programa se suspendiera.

Es así que ahora los organismos operadores de agua potable tienen la responsabilidad de adquirir su propia dotación de cloro, cosa que muchos argumentan que no han podido efectuar por falta de presupuesto para ello.

Así lo estableció Rogelio Curintzita, representante de la CEAC, quien señaló que ahora se les consigue a los municipios una lista de los proveedores que ofrecen el cloro más barato, para que a su elección realicen el pedido.

Empero, los ediles encasillados en la lista negra de los que no cloran el agua aseguran que la suspensión del programa repercute en no poder clorar el agua y en la salud de los habitantes, pues el presupuesto, en vez de invertirlo en cloro, prefieren gastarlo en otros asuntos.

Por tal razón, según las autoridades de la SSM, es común que la respuesta de los ayuntamientos, al ser sorprendidos dotando de líquido insalubre a la población, sólo argumenten que “no me entregaron cloro este mes”.

Pese a las facilidades que les otorga, los alcaldes siguen poniendo “peros” a la hora de desinfectar el agua, pues hay quienes aseguran “que las máquinas se les descompusieron y que la CEAC aún no los apoya en la reparación”.

Según la CEAC, no es su obligación el arreglar las máquinas si se descomponen, sino es responsabilidad total de los organismos operadores de agua de cada localidad.

El argumento de los ediles
Según autoridades del Ayuntamiento de Álvaro Obregón, acaban de tener una serie de reuniones con autoridades del estado para analizar las acciones y se distribuya agua potable al municipio, en tanto, aseguran que van a “checar” la razón por la cual están en la lista negra de la SSM, pues lo desconocían.

En el caso de Nuevo Urecho, aquí el aparato clorador estaba descompuesto, “pero ya se mandó arreglar y ahora se analiza la manera de conseguir recursos para comprar más infraestructura para sanear el agua potable”. En tanto, durante varias semanas la población utilizó agua insalubre.

En el caso de Villamar, la baja recaudación que tiene, por la cantidad elevada de morosos, provoca que no se cuente con recurso para comprar más cloro; el presidente municipal del lugar no ha autorizado partida presupuestal alguna para adquirirlo.

De acuerdo con Isabel Vargas Hernández, directora del OOAPAS de Villamar, conseguirá para comprar cloro urgentemente, pero para un periodo de tres meses; después de ello el alcalde y el Cabildo deberán autorizar presupuesto para más, de lo contrario, el problema seguirá.

En el caso de Nocupétaro, según explicó Enrique Guzmán, autoridad municipal, “ya vinieron los de la CEAC a nivelar la cloración y al parecer la situación ya se corrigió”. Respecto a la compra de cloro, dijo que el Ayuntamiento se encarga de entregar una partida presupuestaria para adquirir el producto para todo el año.

La CNA no castiga a incumplidos
Desde hace cinco años la CNA no ha sancionado a municipio alguno por no clorar el agua, dado que a la hora de acudir a realizar el propio muestreo han resultado dentro de la norma.

Empero, la Secretaría de Salud reporta un listado de 13 municipios que no cloran el agua potable con alto grado de eficiencia, pese a ello los municipios no han sido acreedores a multas o actas administrativas.

“Antes de ello, se opta por dialogar con las autoridades, pues nada se gana la CNA con sólo cobrar multas si los alcaldes no mejoran o implementan medidas correctivas, que es lo que optamos por realizar, colaborando con los municipios a que lo hagan”, abundó Gerardo Mendoza, funcionario de la SSM.

La CNA tiene la capacidad de proporcionar recursos a los ayuntamientos para que adquieran infraestructura y logren sanear el líquido. Si pese a los apoyos no lo hacen, estableció, entonces sí se aplica una sanción.