El titular de la investigación, Tertuliano Caballero Aquino, afirmó mediante un comunicado del IPN, que la sobreexplotación y el desperdicio de agua no son las únicas causas de su escasez, sino que la deforestación y desertificación representan el principal problema, por lo que es importante proponer alternativas para su buen aprovechamiento.

El sistema, desarrollado en el IPN, consiste en captar el agua de lluvia directamente en los techos de las viviendas y almacenarla en tanques o cisternas.

"El agua captada de los techos es una buena opción en tiempos de lluvia, sobre todo en zonas rurales, ya que la calidad del agua pluvial es de buena calidad para el uso doméstico", aseguró el especialista.

Explicó que el agua se capta de los techos, se recolecta en canaletas y posteriormente se conduce por medio de tuberías a los tanques de almacenamiento, los cuales cuentan con un filtro a base de capas de carbón activado, arena y grava para potabilizar el agua.

Caballero Aquino refirió que de todo el sistema de captación, lo más costoso es el tanque o cisterna de almacenamiento, pues representa más del 90 por ciento del costo total del sistema.

"Con el fin de reducir costos, utilizamos ferrocemento para construir las cisternas, ya que además de contar con un precio accesible es un material ligero, resistente y de fácil manejo; además se ha comprobado que los campesinos aprenden a dominar la técnica en poco tiempo y construyen su propia obra", aseguró.

Destacó que el Sistema de Captación de Agua de Lluvia del IPN se ha implementado con éxito en dos poblaciones del Municipio de Huautla de Jiménez y una comunidad del Ayuntamiento de San Miguel Piedras, en Oaxaca, donde se ha comprobado su utilidad y beneficios para la población.

La importancia de este proyecto de investigación radica en que en México existen viviendas aisladas y poblaciones rurales que tienen muchos problemas de abasto de agua potable y la captación de agua de lluvia puede ser la solución.

El catedrático politécnico dijo que la ventaja en las zonas rurales es que la calidad del agua de lluvia es mejor que en las zonas urbanas e industriales donde el agua de lluvia se contamina por los gases existentes en la atmósfera.