China: El combate necesario

16 febrero 2011

16 de febrero de 2011
Fuente: Prensa Latina
Nota de Luis Melian

Beijing, 16 feb (PL) Siembra de nubes, construcción de pozos, movilización de recursos y personal…China combate una nueva adversidad climática que desde hace meses azota a varias de sus regiones productoras de trigo.

Las mencionadas acciones forman parte de los esfuerzos por minimizar los efectos de una sequía levemente aliviada por la Naturaleza en días recientes con alguna lluvia y nieve, pero sin llegar a alejar las preocupaciones.

Ilustrativa de la realidad es Beijing. Luego de 108 días sin precipitaciones, la capital china recibió la primera nevada de este invierno el pasado día 9, que llegó tarde como nunca antes en 60 años.

Ante la prolongada ausencia de lluvia, nula en algunos casos desde octubre, se impone la respuesta del hombre, máxime si se trata de zonas de reconocida importancia no solo para la economía nacional, sino la internacional.

Esta adversidad golpea a las provincias de Hebei y Shanxi, en el norte, Jiangsu, Anhui, Shandong (este), Henan (centro), Shaanxi y Gansu (noroeste), territorios que concentran el 80 por ciento de las plantaciones del trigo de invierno del país.

Tal situación explica el combate contra este fenómeno, hasta hoy más aliviado por el hombre que por la Naturaleza.

El gobierno destinó más de mil millones de dólares a esta necesaria batalla, desde hace días la siembre de nubes con igual fin es noticia frecuente y ayer se comenzó una operación masiva para construir pozos dirigida por el Ministerio de Tierras y Recursos Naturales.

Solo en Shandong, una de las más golpeadas por la sequía, se prevén crear mil fuentes de agua de ese tipo con vistas a garantizar el preciado líquido a la población, el ganado y para el riego, según explicaron funcionarios de esa cartera.

Igual medida se aplicará en otros territorios.

Esas acciones se suman a los más de dos mil ejercicios de modificación del clima para estimular las precipitaciones.

Con estos esfuerzos China también alivia las preocupaciones en torno a la inflación.

El Indice de Precios al Consumidor registró un alza interanual de 4,9 por ciento en enero, cifra superior en 0,3 por ciento a la de diciembre, luego de alcanzar 5,1 por ciento en noviembre, el más alto en 28 meses.

Por tratarse de importantes productoras de trigo, cualquier afectación en las mencionadas provincias incidirá en los suministros y por ende en los precios. Por suerte, el país dispone de suficientes reservas de granos para atender sus necesidades, según informó el vocero de la cancillería Ma Zhaoxu.

Recordó que esta nación acumula siete años de cosechas abundantes y precisó que las recientes condiciones de sequía en las citadas regiones no afectarán los precios internacionales de los alimentos.

Ese mensaje proveniente del mayor productor y consumidor de trigo del mundo transmite cierta tranquilidad en tiempos cuando las cotizaciones internacionales tienden a subir, en medio de crecientes adversidades climáticas.

Según la Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación (FAO), esos precios alcanzaron el mes pasado su nivel más alto en 20 años.

Respecto a los de diciembre, escalaron 3,4 por ciento y llegaron a 231 puntos en el índice establecido por esa entidad, superior al máximo de 224,1 de junio de 2008.

En cuanto a los de oleaginosos y cereales, las alzas fueron de 5,6 y 3,0 por ciento, respectivamente, a raíz de una baja en la oferta de trigo y maíz, muy golpeados por malas cosechas.

Con su combate China no solo protege el mercado nacional, sino también el internacional. De tener que recurrir a ese último en busca de trigo, por ejemplo, las presiones sobre los precios serán mayores.

¿Alguna duda de ello?

Veamos el caso contrario. Este martes los del citado cereal cayeron 3,6 por ciento luego de informarse que el país tiene suficientes reservas de granos para atender las necesidades de su mercado.

Aunque la sequía está por ceder, el anuncio devino alivio a las preocupaciones globales sobre los suministros de ese cereal, justo cuando los incrementos de los precios de los alimentos figuran entre las causas de frecuentes protestas en varias naciones.

A este necesario combate solo le resta que la Naturaleza se le sume.