La caravana por la vida en San Luis Potosí
19 mayo 2015La Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales habría concedido un permiso administrativo para que el gobierno de Sonora construyera un acueducto que trasladara agua desde el Río Yaqui hasta Hermosillo. La Suprema Corte de Justicia de la Nación resolvió que el permiso había carecido del procedimiento previo de consulta a las poblaciones y comunidades indígenas implicadas, afectadas pues.
En las protestas que ha realizado la tribu Yaqui ha habido diversas formas formas de represión gubernamental, a tal grado que desde septiembre de 2014 y hasta hoy se encuentran presos Mario Luna y Fernando Jiménez, voceros y miembros del movimiento.
El 11 de mayo inició la movilización nacional a la que convoca el pueblo Yaqui que se ha llamado Caravana Nacional por la Defensa del Agua, el Territorio y la vida, cuyo objetivo es agrupar las diferentes luchas que se gestan en el país como resistencia a las ambiciones empresariales y gubernamentales que se van apropiando de los recursos naturales, especialmente del agua en todo el país.
La Caravana salió de Sonora, Coahuila y Chiapas y concluirá en el Zócalo de la ciudad de México el 22 de mayo, a su paso por los distintos sitios que visitará se organizarán actividades de discusión y análisis, de divulgación de los riesgos que conllevan las avaricias privatizadoras del agua y los recursos.
El tema se coloca en la más necesaria de las articulaciones que tendría que dar la sociedad mexicana por defender no solo el agua como concepto abstracto, ni de una forma que pudiera sonar romántica, como dadora de vida, es una auténtica lucha por la sobrevivencia. No es casualidad que conforme se presentan proyectos como el del acueducto “Independencia” en Sonora, la Comisión Nacional del Agua haya impulsado junto con el Partido Revolucionario Institucional y el Partido Acción Nacional en la Cámara de Diputados una iniciativa de “Ley General de Aguas” que concibe a aquellas casi como objetos apropiables, que potencializa la privatización del recurso y que despoja de las decisiones sobre sus beneficios a pueblos y comunidades.
Del mismo modo se inserta el debate en torno al proyecto de Acueducto “Monterrey VI” que pretende abastecer a dicha ciudad de aguas de la cuenca del Río Pánuco que compromete a los estados de Tamaulipas y San Luis Potosí, específicamente la región huasteca.
Desde el anuncio del proyecto por parte del gobierno de Nuevo León numerosas organizaciones sociales y voces desde la academia han denunciado la inviabilidad técnica, el altísimo costo económico y sobretodo ambiental que implica dicha intención, además del sometimiento de los derechos humanos de las comunidades a los criterios políticos concentrados en las ciudades industriales.
Lo que se debate es mucho, un gran proyecto que disputa el acceso al agua: o para unos pocos, bajo el arbitrio gubernamental, con cara de privatización del agua; o el acceso equitativo, como derecho humano, a los recursos naturales.
La Caravana llegó anoche a San Luis Potosí, y para este martes 19 la Asamblea de San Luis Potosí junto con el pueblo Yaqui ha planificado las siguientes actividades:
A las 9:30 de la mañana un Conversatorio público en el Museo del Ferrocarril de la ciudad; a las 10:30 una rueda de prensa en el mismo recinto; por la tarde, a partir de las 4:00 pm presentaciones artísticas en la Plaza de Armas; a las 5:00 una concentración en la Caja del Agua para salir hacia la Plaza de Armas de nuevo a realizar un mitín que formule las demandas que formula el movimiento, que se tiene previsto para las 6:00 pm.
Hay que informarse, participar en la medida de lo posible en estas actividades o en las siguientes, hay que defender el agua, el futuro. Que los proyectos más descarnados del librecambismo mercantil parecen no conocer de límites éticos ni de criterios sensatos. Constituyen en cambio una prueba más de que el capitalismo entre sus múltiples contradicciones combate las fuentes de su riqueza: el trabajo y los recursos naturales. Por eso se vendrá abajo, o por eso habrá que hacerlo caer.
19 de mayo de 21015
Fuente: La Jornada de San Luis