Los cruceros por el Nilo están matando el río

25 octubre 2010

25 de octubre de 2010
Fuente: revista80dias

MADRID.- La situación de los ríos de nuestro planeta, es una representación clara de cuál es y será la situación del agua dulce, es decir, de agua potable. Un documento de WWF muestra cómo los principales ríos proveedores de agua dulce del mundo, están en peligro debido en gran parte a la contaminación.

De hecho, más de la mitad de los ríos del mundo están contaminados o sus cauces se secan durante casi todo el año, debido a la sobreutilización.

Un simple crucero en uno de los muchos hoteles flotantes que surcan el Nilo se ha convertido en un turismo de alto impacto nocivo para el medio ambiente. Las aguas del mayor río de África están tan contaminadas que es muy probable que en menos de quince años ya no sean aptas para el consumo. El problema es mucho más peligroso de lo que parece a simple vista, puesto que el cauce del Nilo atraviesa siete países a lo largo de 6.700 Km. hasta el mar Mediterráneo.

Según el reciente estudio “El Nilo, entre la contaminación y la pérdida” publicado por el Centro Habi para los Derechos Medioambientales, el río es surcado por más de 300 hoteles flotantes entre Luxor y Asuán. Más de 300 hoteles que vierten sus desechos en el agua y que, por extensión, son los responsables de la contaminación que acabará, no sólo con la fertilidad del río, las 47 especies de peces con los que se comercia, teniendo en cuenta que ya se han extinguido 30 de ellas y con la economía de más de un millón de personas y de 500 millones de euros al año.

El impacto de este tipo de turismo, que ya no es inocuo para la salud pública va en aumento. Actualmente, según el estudio, más de 17.000 niños mueren de gastroenteritis al año por beber las aguas contaminadas del Nilo, mientras que los fallos renales, son cuatro veces más elevados que en el resto del mundo. Y la causa señalada son las aguas fecales, vertidas directamente desde los baños de los barcos que atraviesan el Nilo diariamente.

Obviamente la culpa de tanta contaminación no exclusivamente de los barcos turísticos, que afirman que todos los cruceros cuentan con un sistema adecuado de tratamiento de sus residuos. Si bien esto no es cierto ni en la mitad de los casos, hay otros factores contaminantes entre los que se incluye la propia población, la industria, etc. Lo que no puede dejar de preocuparnos es el hecho de que la demanda turística internacional ha aumentado proporcionalmente a la turbiedad de las aguas.