México debe diseñar modelo económico bajo en emisiones de carbono: expertos

03 diciembre 2010

3 de diciembre de 2010

Por Carla Contreras

“Se llevó toda la cosecha como puedes ver, baje hoy en día y es lo único que me encontré de unas mil de estas bolas de pipián es la única que me encontré”, comentó Juan Manuel Colorado, agricultor.

“Si pudiéramos comprar alimento no se hubiera muerto el ganado, lo hubiéramos recuperado, mucha gente está teniendo pérdidas”, indicó Raimunda Moreira, ganadera del Amazonas.

“La situación es muy difícil, está casi el 70% de la población de este municipio inundada”, indicó Luisa Márquez, damnificada.

El cambio climático es un fenómeno global, sin embargo, los más afectados serán ellos, quienes viven en condiciones de pobreza en los países en desarrollo.

“Millones de personas y es muy importante decir que generalmente los que más padecen son los sectores más vulnerables de la sociedad en particular los sectores más pobres y menos favorecidos”, mencionó Eduardo Vázquez, director Consejo Consultivo del Agua.

Los riesgos y daños por este fenómeno son evidentes, no obstante hasta el momento no existe una base financiera que permita atender con rapidez proyectos creados para proteger a las comunidades marginadas, desde aspectos de salud hasta la preservación de su entorno, en las zonas rurales.

En la Conferencia de Naciones Unidas sobre Cambio Climático COP16 que se realiza en Cancún, Quintana Roo, se analiza la viabilidad de disponer de fondos a corto y a largo plazos, que ayuden a los países pobres a prevenir posibles afectaciones.

Estos esfuerzos reforzarían programas por ejemplo como los que impulsa en la región de América Latina la Unión Internacional para la Conservación de la Naturaleza (UICN), que no sólo buscan preservan hábitats, sino eventualmente reubicar a poblaciones que habitan cerca de los ríos de Centroamérica.

“Estamos trabajando en estas cuatro cuencas porque son las que tienen poblaciones muy vulnerables a la variabilidad y al cambio climático quienes se enfrentan día a día a los diferentes eventos que se están dando debido a esa variabilidad. Lo importante es con los componentes de este programa hacer conciencia en la parte gubernamental para que inviertan en la adaptación al cambio climático junto con la gestión integral de recursos hídricos”, dijo Rocío Córdoba Muñoz, Unidad de Gestión del Agua, UICN Latinoamérica.

En México, los Fondos Internacionales ampliarían la cobertura de proyectos como un atlas nacional de riesgo, impulsado por la Comisión Nacional del Agua (Conagua) y la Dirección General de Protección Civil, que busca diseñar un esquema de prevención, así como un sistema económico, de infraestructura y vivienda para reubicar a las comunidades asentadas en zonas vulnerables, como cuencas de ríos y barrancas.

Expertos aseguran que México no debe esperar a que se concreten los acuerdos y decisiones internacionales para actuar en el ámbito local. Debido a que es urgente impulsar políticas públicas y diseñar un nuevo modelo económico bajo en emisiones de carbono.

“Me parece que el camino más acertado es la prevención evitar que las pérdidas que los desastres que estamos teniendo o lleguen a suceder tengan el menor impacto posible”, externó Gustavo Alaniz, director del Centro Méxicano de derecho Ambiental (Cemda).

Se estima que a mediados de siglo, habrá mil millones de refugiados climáticos.