Foto: Gilberto Villasana

Más de 50 mil tabasqueños han desistido a salir de sus casas inundadas, reveló el gobernador Andrés Granier Melo al señalar que la cifra de damnificados por cuarta contingencia consecutiva que golpea a la entidad supera ya los 153 mil.

Tras declarar la apertura del V Congreso Médico 2010, del hospital de alta especialidad “Gustavo A. Rovirosa”, el jefe del Ejecutivo local explicó que la razón principal de los afectados para no abandonar sus hogares inundados reside en el temor que hay ante robos de sus pertenencias.

Ante tal escenario, Andrés Granier Melo insistió en que su administración ha tomado todas las medidas de vigilancia y protección necesarias a fin de evitar actos de rapiña, y al mismo tiempo explicó que se castigará a los responsables con todo el peso de la ley.

Al manifestar que son más de 153 mil los habitantes afectados por la inundación, insistió en su llamado para que la Federación dé a Tabasco el trato que se merece teniendo en cuenta lo que el estado aporta al desarrollo del país, como son los hidrocarburos, gas, y energía eléctrica.

“Exijo justicia para Tabasco, que se nos respete como lo que somos mexicanos, igual que el resto del país”, exclamó ante los integrantes del Sector Salud que lo acompañaron al evento.

Al indicar que una vez superada la actual contingencia reemprenderá está lucha por obtener justicia para Tabasco, lucha que comenzó desde el primer día de su gestión, Granier lanzó una fuerte denuncia al manifestar que “las presas para Tabasco sólo han dado desgracia.

Por eso la exigencia del gobierno de Tabasco es que la Federación realice un replanteamiento en la operación del Sistema Hidroeléctrico del Alto Grijalva para que genere menos electricidad y brinde mayor seguridad, porque con el modelo actual se afecta la vida, patrimonio y desarrollo de todo un pueblo, afirmó el gobernador. No se trata de generar energía a costa de los tabasqueños, enfatizó.

Dijo que ese planteamiento representa “un clamor de toda la gente de la entidad que yo, como gobernador, lo abandero con los presidentes municipales, y lo vamos a llevar hasta las últimas instancias”. Recalcó que con un análisis puntual, los cuatro embalses del sistema podrían tener capacidad suficiente en cualquier época del año, y así evitar extraer y desfogar agua en plena temporada de lluvias, como sucede este año.

El mandatario estatal señaló que su solicitud es que el gobierno federal brinde justicia y respeto a los tabasqueños porque también forman parte de este país, razón por la que desde el inicio de la actual contingencia pugna por respaldar a la población afectada por la creciente de los ríos.

Es por ello, añadió, que este miércoles emprendimos gestiones ante la Comisión Nacional de Vivienda (Conavi), para concretar la construcción de otras mil casas en el fraccionamiento Bicentenario, y agregó que se están realizando los procedimientos para ejecutar el programa de Empleo Temporal, una vez que el nivel de las aguas lo permitan.

Sin embargo, mencionó, este hecho retardará la activación del programa, pues mientras continúe la extracción de las presas, los niveles de los ríos se mantendrán por arriba de sus escalas críticas. Apuntó que se efectuarán las evaluaciones necesarias para que este mecanismo de apoyo llegue a quien lo necesite, sobre todo en La Chontalpa y las zonas bajas de Centro, por ser las más afectadas, sin olvidar municipios como Jonuta, “donde la situación también es muy alarmante”.

Reiteró que el próximo jueves 30 de septiembre tiene programada una reunión en la Ciudad de México con el secretario de Hacienda y Crédito Público, Ernesto Cordero Arroyo, para abordar el tema de los paripassus. En este sentido, asentó que la voz de Tabasco encontró eco en legisladores federales y otros estados con problemas similares al nuestro, es decir, que están imposibilitados de aportar las cantidades que pide la Federación para canalizar recursos destinados a la reconstrucción.

Con base en la experiencia y en el daño registrado a la fecha, calculamos que Tabasco tendría que aportar de 400 a 500 millones de pesos, “un dinero que no tenemos”, mencionó Granier Melo, quien externó que la prioridad actual es abastecer de alimento a la población afectada y salvaguardar su integridad física, aspectos perfectamente cubiertos gracias a la labor del Sistema Estatal de Protección Civil.

Claves

El gobernador Andrés Granier Melo dio a conocer que se enviará ayuda sanitaria a Veracruz, en reciprocidad a la ayuda que esta entidad dio a Tabasco en la gran contingencia de 2007.

“Los veracruzanos nos apoyaron con helicóptero, comida, médicos, y dieron cabida a 20 mil tabasqueños en refugios temporales por más de tres semanas sin cargo al erario del Gobierno del Estado”, indicó.

El jefe del Ejecutivo estatal dijo que en solidaridad con el pueblo veracruzano, la Secretaría de Salud de Tabasco envió una caravana integrada por 28 elementos, entre médicos, enfermeras y epidemiólogos, quienes ya fueron comisionados al municipio de Medellín, ubicado en la zona central del vecino estado, aproximadamente a 25 kilómetros al suroeste del puerto.

Aseguró que esta ayuda a Veracruz, donde hay un millón de damnificados, no distraerá ni alejará el propósito central de atender a los tabasqueños afectados por la contingencia. Es una correspondencia al apoyo que recibimos por parte de ese estado en la inundación de 2007, cuando 20 mil tabasqueños encontraron refugio en ciudades como Coatzacoalcos, Minatitlán y Veracruz, reiteró.

Expresó que la ayuda de Tabasco se ha dirigido principalmente al municipio de Medellín, donde se tienen reportes oficiales de una completa devastación a causa de las inundaciones.