Puebla: castiga sequía al campo
04 agosto 20094 de agosto de 2009
Fuente: El Sol de Puebla
Por Martha Benítez
TECAMACHALCO, Pue.-Desaliento, tristeza, preocupación, hay en la gente del campo que trabaja tierras de temporal, debido a que, "en general, la siembra está triste"… desde que dejó de llover hace un mes. Los campesinos aseguran que aunque llegará a llover "en este momento", ya no se lograría una gran cantidad de cosechas; "si acaso todavía podrían crecer las plantas en algunas parcelas, pero, eso sólo serviría para obtener algo de zacate (pasto, forraje) para darle de comer a los animales".
Doña Georgina Rodríguez Andrade, vecina de la comunidad de San José Tuzuapan, municipio de Quecholac, sentada al pie de un árbol, mientras preparaba el almuerzo para los que la acompañaban (tres jóvenes y una anciana), narró su pesar por la ausencia de lluvia en la región.
"Vea usted, en general, la siembra está triste, la milpa apenas despuntó y se puso amarilla la caña por falta de agua, la lluvia se alejó, hace un mes que no llueve, mi esposo, mis hijos y yo hicimos los surcos en mayo, pusimos la semilla, la tapamos, vimos aparecer la planta, pero no prosperó, se quedó así, chaparra, ¡mírela!, ya no creció, no vamos a tener maíz, bueno, ya ni siquiera zacate vamos a sacar de esta tierra seca…
"Por acá (por este rumbo), para donde usted camine, va encontrar lo mismo, milpas y más milpas que ya no crecieron, aunque lloviera ahorita, porque la planta ya se endureció, ya se envejeció, ya no se levanta, ya pasó el momento de que se desarrollara, ya no tuvimos maíz otra vez, otro año nos quedamos sin maíz, hay que volver a comprarlo para hacer las tortillas y para darle de comer a los pollos", lamenta doña Georgina.
Otros años, dijo, "aunque sea hemos levantado 14 bolsas de mazorcas de esta parcela de una hectárea, pero ahora nada, igual que el año pasado, otra vez se atrasaron las lluvias y se echaron a perder la cosechas, bueno, ni zacate vamos a tener para los animales", enfatizó.
Su esposo recibe apoyo de Procampo, pero aseguró que es muy poco. "Apenas tiene una semana que fue mi señor al banco con su tarjeta y le dieron 650 pesos del Procampo, ahora hasta el 15 de agosto le van a dar el otro 50 por ciento, pero es un dinero que no alcanza para nada, nuestros hijos van a la escuela, son tres, los gastos son muchos, por eso mi esposo se emplea en otras cosas, ya no quiere trabajar la tierra", señaló.
LLUVIA…PERO DE LAMENTACIONES
En el recorrido que El Sol de Puebla hizo este sábado por varias munidades de la cabecera distrital de Tecamachalco, Alejandro Sánchez Castro, originario de San Francisco Cuautla, municipio de Yehualtepec, expresó que él se emplea lo más que puede en busca de ingresos económicos para sostener a su familia.
"Ahorita estoy acá en San Juan Tecamachalco trabajando en la instalación de un invernadero para cultivar jitomate; yo creo que está bien, porque así se va a poder ayudar a la gente que tiene parcelas de temporal, pues con eso de que no llueve como antes, no hay cosechas; el ingeniero agrónomo que me contrató dice que se quiere ayudar a la gente de por acá, que para eso se va a construir este y otros invernaderos en estas tierras de temporal", comentó.
Rogelio García Flores, vecino de la misma comunidad de San Francisco Cuautla, refirió que también sale en busca de trabajo por los lugares aledaños a Tecamachalco, ya que en su comunidad "no costea" la siembra en tierras de temporal, "lo más seguro es que haya problemas por falta de lluvia y se echen a perder las siembras, lo mejor es no arriesgar y ganar unos centavos en otras cosas".
Igualmente, Manuel García Machorro, un hombre joven, fuerte (lo mismo que los dos entrevistados anteriores), aseguró que ya se perdió el maíz y el frijol que sembraron muchos campesinos en tierras de temporal, de éste y muchos otros municipios poblanos.
"Tecamachalco es un distrito de riego, es cierto, pero de esto solamente se benefician los que tienen terrenos con infraestructura, los que pueden regar sus campos, los demás no tienen ninguna ventaja, por eso allá, del otro lado, se pueden ver las milpas altas, despuntando y con elotes, mire, ahí cerca se pueden ver bien bonitos, véalos usted, ahí están, del otro lado "…
Continuando el recorrido de este medio hacia Palmar de Bravo, por donde están los letreros de Zozutla, Tecolzingo, Tlacotepec de Benito Juárez (sobre la carretera), a lo lejos se ven los campos, las milpas, los marcados contrastes del tamaño de la planta de maíz, unas "chaparras", como dice doña Georgina, y otras altas, muy altas, "bien desarrolladitas", con ganas de ser cosechadas a finales de este mes de agosto, como refiere Rogelio García Machorro.
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