Sistema Batán: lo bueno, lo malo y lo feo

05 septiembre 2025 Agua

Redacción: agua.org.mx / Karina Bautista-Fondo para la Comunicación y Educación Ambiental, A.C.

Investigación: Fernanda Muraira, estudiante de la Licenciatura de Sustentabilidad Ambiental en la Universidad Iberoamericana

A nivel mundial, las ciudades continúan en expansión y, con ello, aumentan los desafíos relacionados con la infraestructura y la provisión de servicios básicos como el agua. A esta situación se suma el impacto cada vez más evidente del cambio climático, que agrava las dificultades de acceso al agua y al saneamiento. Este panorama se mantendrá mientras el agua siga gestionándose como un recurso lineal y no como lo que realmente es: un recurso limitado que requiere un enfoque circular.

Incorporar la circularidad en la gestión del agua implica aplicar un conjunto de acciones, técnicas y políticas orientadas a fortalecer su sostenibilidad. Esto incluye su reutilización para distintos fines, la valorización de los residuos asociados y la generación de energía a partir de los procesos de depuración.[1]

Para ahondar en el tema, nos centraremos en la reutilización del agua para consumo humano, tomando como referencia el caso del Sistema Batán, en Querétaro.

En la Zona Metropolitana de Querétaro (ZMQ), se plantea desarrollar un proyecto hídrico, llamado Sistema Batán, el cual se promociona desde el Gobierno del Estado de Querétaro como pionero en la regeneración del agua en América Latina[2].

Este proyecto surge en un contexto de crisis hídrica en el estado de Querétaro y persigue tres objetivos principales: incrementar el abastecimiento de agua, reducir la extracción de pozos profundos y ampliar la base de saneamiento en ZMQ[3].

El Sistema Batán se estructura en tres ejes: potabilización, tecnología y cuidado ambiental. En el eje de potabilización, se contempla la regeneración y reutilización de 1,800 litros de agua por segundo (previo tratamiento) con el fin de aumentar el suministro de agua potable. El eje tecnológico se enfoca en la implementación de controles avanzados para el proceso de tratamiento, mientras que el eje ambiental plantea la integración de un humedal funcional de amortiguamiento, diseñado para filtrar el agua mediante procesos biológicos.

En conjunto, el Sistema Batán comprende diversas obras destinadas a consolidar un esquema de reciclaje de agua. Entre ellas se incluyen la ampliación de plantas de tratamiento, la construcción de un sistema de colectores y de conducción de aguas tratadas hacia la presa El Batán, así como una planta potabilizadora, obras de toma y redes de distribución para abastecer a la ZMQ. Además, el proyecto prevé infraestructura complementaria y un presupuesto específico para el mantenimiento integral del sistema. [4]

Para que el proyecto funcione, se necesita construir nueva infraestructura: una planta de tratamiento en Corregidora, un sistema de colectores en la ZMQ, una planta potabilizadora, tanques de almacenamiento, líneas de conducción y sistemas de distribución, además de obras complementarias.

El costo total estimado del Sistema Batán es de 35,722 millones de pesos, de los cuales casi 89% del gasto se destinarán a obras y tecnología. El proyecto tiene un plazo de 30 años y contempla el inicio de pagos en 2026.

Para que el agua reciclada del Sistema Batán pueda destinarse al consumo humano en la ZMQ, el proyecto debe cumplir con varias normas oficiales mexicanas. Entre ellas se encuentran[5]:

  • NOM-003-SEMARNAT-1997, que regula la calidad del agua residual tratada utilizada en servicios públicos.
  • NOM-001-SEMARNAT-2021, que establece los límites de contaminantes permitidos en descargas de aguas residuales a cuerpos receptores.
  • NOM-127-SSA1-2021, que define los parámetros de calidad del agua para consumo humano.
  • NOM-004-SEMARNAT-2002, que regula la calidad, uso y disposición final de lodos y biosólidos generados en plantas de tratamiento, con el fin de proteger la salud y el medio ambiente.

El proyecto del Sistema Batán se presentó en mayo de este año mediante una consulta pública organizada por la Comisión Estatal de Aguas de Querétaro (CEA). Según los datos de la propia consulta, el proceso se desarrolló en cinco etapas, y la etapa consultiva (es decir, la parte en la que se recabaron opiniones) se realizó del 14 al 19 de mayo, en solo cinco días. Para el cuestionario en línea se contó con una muestra representativa de 15,463 personas [6].

Para revisar todas las preguntas del cuestionario y sus detalles, se puede consultar el reporte completo del proceso de consulta aquí.

Hoy en día, el proyecto del Sistema Batán, según la narrativa oficial del gobierno del Estado y la CEA, parece avanzar sin contratiempos. Pero ¿qué opina la ciudadanía al respecto?

Distintas voces activistas en Querétaro señalan que el Sistema Batán no aborda la problemática principal de la ZMQ, que está más relacionada con la distribución desigual del agua y la falta de mantenimiento de la infraestructura existente, que con una escasez provocada únicamente por la crisis hídrica. Por ejemplo, se tiene registro que el 50% del agua se pierde por fugas.[7]

El pasado 22 de julio se realizó el Foro científico-ciudadano sobre los riesgos sanitarios y financieros del proyecto, donde la sociedad civil organizada presentó diversas peticiones, entre ellas[8]:

  • Realizar un diagnóstico participativo e integral de la situación hídrica.
  • Evaluar otras alternativas para el abastecimiento y para el reúso de agua.
  • Implementar pruebas piloto con esquema de financiamiento público.
  • Llevar a cabo una evaluación ambiental del proyecto.
  • Garantizar transparencia sobre la calidad actual del agua mediante un laboratorio estatal con información pública confiable.
  • Establecer mecanismos de vigilancia social representativos, efectivos y sin conflicto de interés.

Otro factor que genera preocupación es la procedencia del agua que se planea reutilizar: drenajes urbanos, casas, escuelas, hospitales y aguas pluviales. Debido a la gran variabilidad en la calidad de estas fuentes, se cuestiona la eficacia del proceso de potabilización y su viabilidad para consumo humano. Además, en México no existen precedentes de proyectos que destinen aguas residuales tratadas al consumo humano; normalmente se utilizan para fines productivos.

Sin embargo, inconformidad de la ciudadanía no se queda en la protesta, sino también en la propuesta, que además son mucho más baratas y con responsabilidad ambiental. Entre las que destacan:

  • Un plan de restauración ecológica que promueva la recarga del acuífero mediante reforestación, captación pluvial y medidas de eficiencia hídrica sustentables.
  • Un estudio integral sobre las fugas, que identifique causas, zonas críticas, costos de reparación y el volumen recuperable, con resultados públicos.
  • Un programa de intercambio de aguas, destinando el agua residual tratada al uso industrial y priorizando el agua de pozo para consumo humano.
  • Una Evaluación Ambiental Estratégica del proyecto, con revisión técnica y social.
  • La creación de un Laboratorio Estatal de Calidad del Agua, auditoría ciudadana y colaboración científica internacional, para garantizar información pública y confiable.

Para concluir, lo bueno de este proyecto es que se apuesta por el reúso de agua, eso es un gran avance. Lo malo, no aborda la distribución desigual ni las pérdidas de agua y genera dudas sobre la potabilización. Lo feo, podría vulnerar derechos humanos y la confianza ciudadana por falta de transparencia y participación.

Es nuestra responsabilidad seguir de cerca los avances del Sistema Batán y exigir que el gobierno estatal y la CEA atiendan las preocupaciones y demandas de la ciudadanía.

 

Infórmate a detalle aquí.

 

 

Referencias:

[1] Ecodes (s.f.) La circularidad del agua, una oportunidad para avanzar en el Plan de Recuperación. Ecodes

[2] Poder ejecutivo del Estado de Querétaro. (2025). Sistema Batán.

[3] Poder ejecutivo del Estado de Querétaro. (2025). Sistema Batán.

[4] Poder ejecutivo del Estado de Querétaro. (2025). Decreto por el que la Sexagésima Primera Legislatura del Estado de Querétaro autoriza a la Comisión Estatal de Aguas, así como al Poder Ejecutivo del Estado de Querétaro, para desarrollar el proyecto denominado “Sistema Batán”, bajo el esquema de Asociación Público Privada, en los términos que en el mismo se precisan

[5] Poder ejecutivo del Estado de Querétaro. (2025). Decreto por el que la Sexagésima Primera Legislatura del Estado de Querétaro autoriza a la Comisión Estatal de Aguas, así como al Poder Ejecutivo del Estado de Querétaro, para desarrollar el proyecto denominado “Sistema Batán”, bajo el esquema de Asociación Público Privada, en los términos que en el mismo se precisan

[6] Comisión Estatal de Agua de Querétaro, Gobierno del Estado de Querétaro y Poder Ejecutivo del Estado de Querétaro. (2025). Consulta Pública Resultados.

[7] Buconi, L. (2025). Proyecto El Batán, la antesala de la privatización del agua en Querétaro.

[8] BajoTierra Museo del Agua (12 de agosto de 2025). Boletín de prensa. Facebook.

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