Río Coatzacoalcos entró en sus casas poco a poco

14 noviembre 2013

 

 

DESESPERACIÓN. Cira Pomián, su hijo, nuera y nietos se preparan para desalojar su vivienda en la isla de Capoacán. (Foto: RAÚL ESTRELLA / EL UNIVERSAL )

Ella, Geisa Aglae, quien cumplirá cuatro años el próximo martes, y él, Veckar Salim Pacheco, de ocho, veían el agua invadir su espacio y a sus padres, su abuela y otros habitantes de la isla preparar lo indispensable para comenzar a evacuar.

En su vivienda de cuatro por seis metros, que se iba obscureciendo en su interior porque se habían quedado sin energía eléctrica, sus padres coincidieron en que esperaban que entre ayer y hoy el agua llegue a casi un metro, o más, de desbordarse el río Coatzacoalcos por completo, pues en algunas partes rebasó los límites, como sucedió en 2010, cuando el agua llegó a un nivel de casi dos metros, cubriendo sus viviendas.

Ante la situación, Veckar Pacheco, padre de los menores, dijo que sacarán lo que puedan y que ayer por la noche estarían dejando su hogar para evitar una desgracia, en una situación que, dijo, “no queda de otra más que esperar lo que tenga que pasar. Mientras, nos iremos con nuestros hijos, mi esposa Lizette y mi madre [Cira Pomián]”.

Habitantes de esta comunidad se sienten olvidados por las autoridades, pues coinciden en que ni Protección Civil estatal o autoridades del municipio les han avisado sobre el riesgo, y mucho menos han implementado un dispositivo para evacuar la isla, a la cual tienen que entrar o salir en lancha.

Adriana Pomián dice que en la parte de Capoacán donde vive, son cinco familias las que están ahí, de siete integrantes cada una, y que sólo tienen una pequeña lancha, por lo que consideró que las autoridades deberían acudir en apoyo de la gente.

“El agua ya está más cerca. El río está echando agua hacia adentro. Estamos esperando para evacuar, porque el río va a seguir creciendo, y si sigue así, a medianoche estaremos inundados casi en toda la isla”, enfatizó la mujer de 32 años, quien dice que son tres días en los que no ha dejado de llover.

Jesús Alfonso Pomián, pescador de 66 años, dijo que la gente ha comenzado a salir de la isla con sus propios medios, pues las autoridades los tienen olvidados y hasta ayer nadie había cruzado el río Coatzacoalcos para darles siquiera alguna información de cómo está la situación por el frente frío número 12 y organizar una evacuación.

Aseguró que el agua en algunos puntos ha subido un metro. “La verdad esto ya está muy peligroso”, insistió el hombre, quien fue a casa de algunos familiares a advertirles que el río se está desbordando poco a poco.

Ismael García y su esposa Nayeli coincidieron con Alfonso y comentaron que ya se están llevando algunas pertenencias a casa de un vecino, en el segundo piso, para evitar que se pierdan si sube el agua. Ellos y sus dos hijos irán a un albergue de Minatitlán, pues temen una desgracia.

Andrea González, de 53 años, en cuya vivienda comenzaba a meterse el agua, dijo que esperaba a su hijo Adrián para decidir adonde ir, mientras tanto ponía en bolsas de plástico algo de ropa, despensa y papeles importantes, pues en 2010, recordó, su casa se inundó hasta el techo y perdió todo. “Apenas nos repusimos y otra vez el agua nos quiere arrancar todo”, expresó.


14 de noviembre de 2013
Fuente: El Universal
Nota de Julián Sánchez

Artículos relacionados
Compartir

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Acceder a agua es un derecho humano, pero hacerlo de forma clandestina es un delito. ¿Qué pasa con el huachicoleo de agua?  ¿Sabes cómo se maneja ese negocio?   ¿Qué sabes sobre el tema?

¡Pon a prueba tus conocimientos en este tema! ¡Y diviértete!

 Ir a la trivia