Según estudios realizados por la asociación civil Niparajá y el Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, en 2013, y por Niparajá y Ocas en 2015, el líquido del pozo Ardilla 1 contiene entre 0.020 y 0.0398 miligramos de arsénico por litro y el pozo Ardilla 2 entre 0.045 y 0.054 miligramos. Las muestras, informaron los activistas, fueron analizadas en los laboratorios certificados Microlab Industrial y LG-UNAM.
Ocas expuso que el límite permisible de arsénico, de acuerdo con la norma oficial mexicana 127-SSA1-194, es de 0.025 miligramos por litro, ya que este elemento es carcinógeno, según la Agencia de Protección al Medio Ambiente de Estados Unidos.
La asociación civil sostuvo que las altas concentraciones de arsénico en el agua fueron confirmadas por la Comisión Nacional del Agua. Exigió que la Secretaría de Salud emprenda una campaña intensiva para evitar que la población de Chametla y El Centenario consuma el agua de ambos pozos, y acusó al secretario estatal de Salud, Víctor George Flores, de negar la contaminación.