Agua y Seguridad Alimentaria

16 noviembre 2022 Agua

Redacción: agua.org.mx/ María Fernanda Juárez- Estudiante de Sustentabilidad Ambiental de la Universidad Iberoamericana

Foto: Canva

 

La disponibilidad de agua en cantidad y calidad adecuada es fundamental para garantizar la seguridad alimentaria, que existe cuando todas las personas tienen, en todo momento, acceso físico, social y económico a alimentos suficientes, inocuos y nutritivos que satisfacen sus necesidades energéticas diarias y preferencias alimentarias para llevar una vida activa y sana [1].

Alrededor del 70% del agua extraída a nivel mundial es utilizada en la producción de alimentos, aunque en algunos países en desarrollo esta cifra alcanza hasta el 95 % [2].

Los vínculos entre el agua y la seguridad alimentaria son múltiples, en muchas partes del mundo los recursos hídricos se hallan sometidos a una presión creciente y el sector agrícola se posiciona como el mayor consumidor de agua, no solo por la producción de alimentos, sino también de otros cultivos no comestibles como el algodón o los aceites industriales [3].

Producir 1 kilo de arroz requiere cerca de 3,500 litros de agua y una taza de café, alrededor de 140 litros 3.

Los modelos actuales de intensificación agrícola no están resultando sostenibles. Los elevados niveles de uso de la tierra y el agua están llevando a los sistemas de tierras y aguas al límite y, con ello, impactando negativamente a los ecosistemas y su biodiversidad [4].

La Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) prevé que para el año 2030, la demanda de alimentos se incremente en un 50% (70% para el 2050), por lo cual, satisfacer esta demanda supondrá retos importantes también para el sector hídrico[1]. .

¿Cómo puede el mundo asegurar la seguridad alimentaria ante la escasez cada vez mayor de recursos hídricos y la competencia creciente por el uso del agua?

Con el objetivo de avanzar en la transformación de los sistemas alimentarios para satisfacer la demanda futura se necesita de un enfoque centrado en la planificación integrada de agua y suelo, así como la optimización de recursos, insumos y medios de producción [3] [4].

Adoptar prácticas de producción a escalas más responsables desde el punto de vista ambiental puede invertir las tendencias de deterioro de tierras y aguas, lo cual lleva a procurar la seguridad alimentaria, garantizar una producción favorable a la naturaleza y luchar contra la pobreza y las desigualdades [4].

Consultar referencias:

[1]FAO.(2011) La Seguridad Alimentaria: Información para la toma de decisiones. Programa CE-FAO- Disponible en: https://www.fao.org/3/al936s/al936s00.pdf

[2]Red del Agua UNAM. (2020). Agua y alimentos. Impluvium. Número 13, octubre-diciembre 2020. Universidad Nacional Autónoma de México. Disponible en:  https://agua.org.mx/biblioteca/impluvium-agua-y-alimentos/

[3] ONU. (2014). Agua y Seguridad Alimentaria. ONU. Consultado (10, 2022) https://www.un.org/spanish/waterforlifedecade/food_security.shtml

[4] FAO. (2021). El estado de los recursos de tierras y aguas del mundo para la alimentación y la agricultura – Sistemas al límite. Informe de síntesis 2021. Rome. https://doi.org/10.4060/cb7654es

5 Comité de Seguridad Alimentaria Mundial. (2015). Contribución del agua a la seguridad alimentaria y nutricional. FAO. pp. 1-155. Consultado (10, 2022) https://www.fao.org/fileadmin/user_upload/hlpe/hlpe_documents/HLPE_Reports/HLPE-Report-9_ES.pdf   

 

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